No estamos en Venecia,pero cualquier parecido es una mera coincidencia. No son las góndolas que transportan a los enamorados y que desean conocer a la ciudad antes mencionada, nó,son los Jhonson o sistema de transporte con motores fuera de borda el más utilizado por todos nosotros los Cerranos,para viajar,ya sea a otro departamento,llegando al Suán (Atlántico) o para trasladarnos a los corregimientos del Cerro o al nuevo municipio de Concordia(Malabrigo)antes corregimiento del Cerro de San Antonio.Se que para muchos Cerranos que tienen tiempo de no regresar al Cerro,esta fotografía le va a producir mucha nostalgia, ya que las ganas no les van a sobrar de querer dar un paseo en estos aparatos que nos hacen querer más la región de donde somos oriundos y más aún querer más al Río Magdalena,esa gran corriente caudalosa que recorre en su largo a toda Colombia.
Se nos viene entonces en mente,las madrugadas cuando se tenía que viajar y encontrábamos en el puerto de los Jhonson,desde muy temprano a la señora Olga "peto",a quien le decían así por vender en ese sitio un delcicioso peto caliente(la señora Olga,ya falleció hace mucho tiempo),recordamos también al "Negro" Ramos,también fallecido,al famoso Abimael Ramos "El Zorro",quien hoy presta sus servicios como motorista al Hospital Local del Cerro de San Antonio.
Y como olvidar al señor Pánfilo,oriundo del Suán (Atlántico),a quien ocupábamos sus servicios de boga,para que nos atravezara de la Orilla del Atlántico (Suán) a la del Cerro,cuando llegábamos demasiado tarde y no había ya el servicio de los Jhonson. Pánfilo con su "canoita" y su canalete,conocía los misterios del río y su travesía era un diálogo con el caudaloso,que sólo terminaba,cuando hacía la travesía dos veces y llegaba al puerto del Suán.
Recordar es vivir, pero al Cerro hay que volver, para quererlo más!
Arq. JOSE RICARDO MERIÑO BARRIOS
Director
